lunes, enero 18, 2010

De la chingada...

A través de los noticieros nos hemos enterado de situaciones que nos transmiten una sensación de caos. Escuché a un hombre mayor en el Metro: “esto está de la chingada”. Por supuesto que tiene razón, los últimos sucesos están de miedo: el temblor en Haití y la intromisión de la iglesia en asuntos del Estado.
El gobierno haitiano se derrumbó y muestra su ineficiencia para atender a la población, a su población. Las imágenes del desastre inundan la televisión y la Red. Imágenes en vivo con Paola Rojas en A las Tres [escribo esto a las 15:35 del jueves 14], muestran a una ciudad destruida hace dos horas, pero la realidad es que pasó hace más de 50 horas y la situación sigue igual
La iglesia [ya sabemos quien], dijo que las leyes de dios están por encima de las leyes de los hombres y que no votemos por el PRD [en eso último estoy de acuerdo]. Esta institución parece experimentar un retroceso a la época de la Inquisición o tal vez nunca salió de ahí. Ciertamente el PAN y el clero deben dejarse de ideas anacrónicas.
El frío no cesa, las nevadas en los estados y en otros países son históricas; y además hay que añadir el lastre: el alza de precios, matanzas en los estados del norte, la misma inseguridad, subió el índice de suicidios, Calderón diciendo que la economía se recupera, y ¿dónde está Juanito?
Parte de calentamiento global y parte de Realismo mágico.